Los niños comienzan a desarrollar la imagen corporal de sí mismos hacia los 6 años. Sin embargo, la adolescencia es una etapa complicada ya que buscan encajar y gustar, lo que puede hacer que se vean diferentes a cómo son en realidad.
Tenemos que estar atentos a estos cambios y ayudarles a fomentar su autoestima para que no caigan en problemas como la anorexia o bulimia.
Es importante potenciar su autoestima para evitar problemas como los trastornos alimenticios
La adolescencia es una etapa complicada para padres y chicos ya que está marcada por muchos cambios a nivel físico y emocional que pueden causar problemas en la convivencia familiar como las malas contestaciones, los problemas con el alcohol o el sexo o la imagen distorsionada de sí mismos.
Y es que todos los adolescentes quieren encajar, formar parte del grupo, ser aceptados por los demás e incluso gustar a alguien especial. Por eso, intentan que su aspecto físico esté acorde con la moda del momento: la ropa, el corte de pelo, los tatuajes o los piercings son algunas de las consecuencias de esta inseguridad y falta de autoestima que presenta la mayoría de adolescentes, pero también los trastornos alimenticios.
A pesar de estar delgados o normales, muchos de ellos se ven gordos, diferentes de los cuerpos que salen en las revistas y la televisión. Las inseguridades propias de esta edad o ciertos comentarios negativos de compañeros o amigos pueden derivar en una anorexia o bulimia, enfermedades muy graves que pueden desembocar en otras mayores.
Por eso, es importante que estemos pendientes de cómo se ven nuestros hijos a sí mismos para detectar cuanto antes cualquier problema de este tipo y evitarlo siempre que sea posible:
- Controla lo que tu hijo ve en televisión, el móvil o la tablet para evitar contenidos o campañas de publicidad que puedan influir en su imagen corporal.
- Bloquea búsquedas online peligrosas como “dietas milagro”, “cómo adelgazar rápidamente”, “cómo bajar de peso”, “cómo vomitar sin que se enteren”, etc. Así como el acceso a ciertas páginas web.
- No hagas comentarios negativos sobre tu aspecto delante de tu hijo. Debe ver que te aceptas y te quieres tal y como eres.
- No te muestres obsesionado por el físico y enseña a tu hijo que hay cosas mucho más importantes que pesar un poco más o un poco menos.
- Ayuda a tu hijo a apreciar sus cualidades y habilidades para que tenga una imagen positiva de sí mismo.
- Fomenta la autoestima en tu hijo.
- Si tu hijo realmente tiene un problema de peso y es conveniente que adelgace, ayúdale por medio de un nutricionista que le dé las pautas más adecuadas.