Cada vez es más frecuente que las nuevas tecnologías estén presentes en la vida de nuestros hijos. Somos generaciones diferentes y ellos han nacido en una revolución digital que no deja de crecer.
Existe información que si llega a nuestros hijos podría exponerlos a riesgos
A la hora de utilizar smartphones o computadores, padres e hijos tenemos percepciones muy diferenciadas. Esto nos hace aproximarnos al mundo con una visión y perspectivas diferentes y genera un aprendizaje que, sin duda alguna, es recíproco:
- Nosotros como padres percibimos la velocidad que tienen nuestros hijos para aprender usando las nuevas tecnologías.
- Nuestros hijos encuentran en nosotros la guía, la experiencia y la sabiduría entendida como cordura, juicio y saber.
Posiblemente, este segundo impacto lo valoran sobre todo cuando se enfrentan a situaciones complejas o problemas que les hacen reflexionar sobre el significado que tiene nuestra sabiduría (aunque no necesariamente sea sabiduría o entendimiento técnico o tecnológico).
Nosotros como adultos sabemos discriminar entre la información que consultamos, pero, aún así, en ocasiones, llegamos a información de muy mala calidad. Y si esa información llegase a manos de nuestros hijos podría exponerlos a riesgos concretos.
Somos conscientes de que los menores necesitan un acompañamiento. Por ello, nos informamos constantemente sobre herramientas y recomendaciones para frenar los riesgos de adicción, sexting o bulling y las formas de ayudarlos.
Con el fin de recomendar a padres y madres las pautas para una correcta utilización de los dispositivos móviles y el uso de la tecnología en niños y adolescentes, hemos elaborado un decálogo que recoge las mejores prácticas para el uso de la tecnología que podemos utilizar.
El objetivo es ofrecerte estrategias concretas que puedas utilizar en tu día a día y que este decálogo se convierta en un material práctico que permita gestionar los retos del momento que estamos viviendo con los avances tecnológicos.
1. Riesgos y normas
- La importancia de pactar normas y límites muy claros. Establece unas horas para conectarse y pacta las consecuencias que tiene si se incumplen.
- Debes entender que los dispositivos móviles forman parte de la vida de nuestros hijos, por lo que no hay que imponer desde el principio.
- El establecimiento de acuerdos será vital para que entiendan que están adentrándose en un mundo digital.
2. Dispositivos adecuados
- Existe una gran variedad de computadores y celulares. Sin embargo, busca el que más se adapte al nivel de desarrollo del niño y de sus necesidades de aprendizaje.
- Si es necesario, en las primeras etapas puedes utilizar herramientas de control parental que permitan delimitar espacios y minimizar riesgos.
3. Utilizar la tecnología en un espacio común
- Dentro de los espacios del hogar, marca uno que sea común, donde los niños vean que pueden compartir con adultos. No deben esconder el uso que hagan con sus celulares o computadores.
- Es fundamental que lo hagan y consulten libremente frente a nosotros.
- Este espacio común y compartido nos permitirá tener acceso a conocer las acciones, páginas visitadas o aplicaciones que están jugando sin que sientan que invadimos su privacidad.
4. El tiempo de conexión
- Como hemos mencionado antes, pacta unas horas de conexión. Ellos entenderán el horario del hogar y de la tecnología. Todo en su lugar.
- De hecho, en estos momentos donde pasamos largos períodos de tiempo en casa, es importante recordar las recomendaciones que realizan los oftalmólogos cuando nos sugieren “mirar al infinito” al menos 1 hora al día para liberar a nuestros ojos de la tensión y el esfuerzo diario.
- Marcar tiempos y proponer diversas actividades (extraescolares, deportes, etc.) puede ayudar a minimizar los tiempos de conexión.
5. El trato en redes sociales
- Las redes sociales son un espacio donde nos sentimos cómodos y conocemos nuevas personas y perfiles. Sin embargo, las comunidades que se crean alrededor de determinadas cuentas se autogestionan prácticamente sin control o supervisión.
- Es importante hacer entender a niños y adolescentes el trato que deben tener para interactuar y poder desenvolverse de manera autónoma y segura en ellas.
6. La información no siempre es verdadera
- Encontrar información en internet es muy fácil, pero no toda es fiable o válida.
- Como padres debemos enseñar a ser críticos ante todo lo que vean.
- Realicemos juegos de búsquedas de información y reflexionemos sobre la información encontrada, ello los ayudará a enfrentarse a futuras búsquedas de información con mayor madurez y responsabilidad.
7. Estar actualizado en tecnología
- Las generaciones son diferentes, pero no impide que no podamos seguir aprendiendo.
- Estar actualizado de lo que ocurre en tecnología facilitará el acompañamiento a los menores.
- En estos momentos, con el auge de la formación online, existe una oferta muy amplia de formación (en algunos casos también gratuita) que puede sernos de gran ayuda para conocer nuevas herramientas y funcionalidades.
8. Eres un ejemplo
- Nuestros hijos y adolescentes tienen computadoras desde muy pequeños.
- Ellos las perciben como un entretenimiento y, por tanto, este es el principal uso que les otorgan.
- Sin embargo, los ordenadores y dispositivos digitales nos ofrecen múltiples herramientas.
- Desde nuestra perspectiva debemos enseñarles las utilidades básicas que nosotros hacemos servir, como por ejemplo: una búsqueda de internet, el contacto con la escuela o realizar trámites específicos.
9. La adicción
- Usar lentes para la pantalla es cada vez más común, pero esto no quita que haya un síntoma de adicción.
- Permanece atento si percibes una situación en la que no pueda despegarse del celular. Hay una diferencia entre entretener y el abuso de pantallas.
10. ¿Cómo actúan? ¿Conductas?
- Aprovecha y dedica tiempo a analizar las conductas que se asumen frente a la frustración, el disfrute o frente a visualizaciones de vídeos de Youtube o de publicaciones de influencers.
- Será importante analizar después con ellos cómo lo perciben y darles feedback sobre lo que hemos sentido.
Marcar desde un inicio unas pautas facilitará el proceso de aprendizaje, no olvidemos que la coherencia y la razón van de la mano para hacer entender cómo funcionan las tecnologías digitales.