“Oído absoluto”, término quizás no tan conocido por muchas personas que no tienen un contacto particular con el ámbito musical, sin embargo uno muy reconocido en este entorno.
Percepción absoluta del tono
Se trata de la capacidad de identificar y reproducir con precisión una notas musicales sin referencia auditiva. En otras palabras, una persona con oído absoluto puede reconocer la altura tonal de una nota sin necesidad de compararla con otra nota de referencia, puede identificar notas incluso en sonidos no derivados de instrumentos musicales, así como notas superpuestas entre sí, mientras que a su vez es capaz de reproducirlas.
A una persona que no posee esta capacidad le suele llevar años de entrenamiento auditivo el poder identificar notas musicales, escribirlas y reproducirlas precisamente, incluso teniendo una percepción auditiva alta.
De hecho, la mayoría de las personas desarrollamos el oído relativo, que implica la capacidad de percibir las relaciones entre las notas y reconocer melodías y acordes sin necesidad de identificar notas específicas de manera aislada.
Sin embargo, las personas que tienen esta percepción especial no necesitan ese mismo proceso de capacitación: todo suele comenzar por un fuerte interés musical en la niñez que deriva en una mínima preparación musical para poder asociar lo que se escucha desde el lenguaje.
Por supuesto, la persona que es dotada de esta capacidad puede luego llevar esto al nivel que desee a través de la escucha, del estudio y de la inmersión en el mundo musical.
¿Cómo podemos identificarlo?
En los niños, el desarrollo del oído absoluto puede variar, y algunos pueden mostrar habilidades desde una edad temprana. Algunos signos que podrían indicar la presencia de oído absoluto en niños son:
1. Reconocimiento preciso
Los niños con oído absoluto pueden identificar notas musicales específicas sin ayuda de un instrumento musical. Incluso pueden identificar qué nota musical produce un sonido ambiental de cualquier tipo.
2. Habilidad para reproducir notas
Pueden cantar o tocar una nota solicitada con precisión sin tener una referencia auditiva, lo cual hace que puedan acceder a tocar o cantar canciones u obras musicales con facilidad, velocidad y fluidez.
3. Sensibilidad auditiva
Los niños con oído absoluto pueden ser más sensibles a los sonidos en su entorno y pueden notar diferencias sutiles en la altura tonal.
Esto muchas veces puede hacer que los niños sufran un poco de las disonancias entre los sonidos, de los sonidos fuertes o de los ambientes en los que se presenta una multitud de sonidos en simultáneo, como en situaciones sociales grandes.
Estos ambientes muchas pueden abrumar a quienes tienen esta capacidad, generando malestar o incomodidad incluso, más que nada en los niños en edades tempranas
5. Interés y habilidades musicales tempranas
Es posible que los niños con oído absoluto muestren un interés temprano en la música y demuestren habilidades musicales notables para su edad. Suelen acercarse a instrumentos musicales, si es que los hay en casa, a “tocar” con objetos cotidianos o a quedar cautivados ante la escucha musical o los medios audiovisuales.
Si sospechamos que un niño podría tener oído absoluto, es importante observar su comportamiento musical y, si es posible, consultar a un profesional de la música o un especialista en audición para obtener una evaluación más precisa y poder acompañar de forma informada al niño con esta capacidad.
La mayoría de las personas con oído absoluto tienen una brillante carrera musical, de recibir la estimulación y capacitaciones complementarias correctas. Eso sí: no todos los niños que muestran una afinidad por la música tienen oído absoluto, ya que la educación musical y la práctica también pueden influir en el desarrollo auditivo.
Y cabe remarcar que tener oído absoluto no es esencial para disfrutar y participar de la música: todos podemos disfrutar plenamente del arte musical, tanto de la escucha como de la interpretación, más allá del nivel de nuestras capacidades auditivas.