El acceso de los jóvenes a internet y a las aplicaciones de mensajería instantánea como WhatsApp ha repercutido en el aumento de los casos de ciberbullying a través de esta aplicación (además de redes sociales u otras aplicaciones del mismo tipo).
Solo de esta manera se conseguirá disminuir los peligros que conllevan estas acciones y, sobre todo, actuar cuando ocurran estas situaciones. Cada vez son más los menores que están afectados por este tipo de acoso ya que es fácil compartir rápidamente burlas, imágenes, insultos… y también es fácil acosar a otros sin pensar en las consecuencias que eso puede generar.
Cómo acabar con el ciberbullying en WhatsApp
Es habitual que en los grupos de esta aplicación donde hay menores haya insultos a modo de broma, pero el peligro ocurre cuando los descalificativos los recibe una persona de manera habitual. Un menor puede escribir una provocación y otros lo aprovechan para usarlo como arma arrojadiza contra una persona mientras los demás se ríen de esa supuesta gracia. Es decir, los observadores apoyan el acoso en lugar de criticarlo o frenarlo.
Es más, puede ocurrir que, si alguien defiende al acosado, sea también otro objetivo de burlas y los demás se vuelvan contra él. En lugar de frenar la situación esto la puede agravar… por eso es tan importante buscar la solución lo antes posible.
En este sentido es fundamental educar a los menores y a los padres para que hagan un uso responsable de las nuevas tecnologías.
Por este motivo es necesario educar a los hijos para que cuando este tipo de acoso ocurra, no se rían las gracias y sepan posicionarse firmemente en contra de estas actitudes. Tomar medidas de respeto como enfrentarse a los acosadores o salirse del grupo para dejar claro que ese tipo de actitudes no son tolerables.
También es fundamental que se busquen otros compañeros para hacer equipo ante este tipo de comportamiento y ponerse de acuerdo para defender los valores y que ese acoso no vuelva a ocurrir. Porque si se ríen las gracias en el acoso, entonces se vuelven cómplices y atacantes del mismo.
¿Qué debes hacer si eres víctima de acoso por WhatsApp?
Si sufres ciberbullying a través de WhatsApp entonces lo primero que debes hacer es no caer en las provocaciones e ignorarlo por completo. Si los insultos o amenazas continúan entonces recuerda hacer capturas de todo lo que te están diciendo y guardarlo como prueba.
Después, si ocurre en un grupo, bloquea a los administradores y a los acosadores y sal del grupo. Si te ocurre en chat privado sin estar en un grupo, bloquea al acosador para que no pueda escribirte más. Si utiliza otros números diferentes, haz lo mismo: capturas de pantalla y bloquea cada número desde donde te escriban palabras hirientes.
A continuación cuéntalo a una persona adulta de confianza y muéstrale todas las capturas de pantalla que has hecho. Lleva tu móvil a la policía y muéstrale todas las pruebas para que las descarguen y las archiven. Si el problema continúa denuncia a esa persona o personas para que sus padres tengan conocimiento de lo que está ocurriendo lo antes posible.
Nunca, bajo ninguna circunstancia, deberás callar lo que ocurre. Siempre busca ayuda porque no estás solo y siempre, esas personas que insultan suelen ser cobardes con problemas emocionales severos.
Otros aspectos que debes tener en cuenta
En ocasiones, las personas que son atacadas no se dan cuenta de lo que está ocurriendo, por eso es fundamental tener otros aspectos en cuenta para acabar con ese problema lo antes posible:
- Reacciona. Aunque sea a través de una pantalla, un acoso es un acoso y no se debe permitir bajo ninguna circunstancia. No hay que aceptar ni normalizar que esto ocurra.
- El acoso es real. No importa quién sea el acosador o el acosado, un acoso es un problema real y se debe denunciar. Por eso, te recomendamos que dejes de ser un espectador para pasar a ayudar a esa persona a la que le están haciendo daño.
- No es culpa tuya. Jamás tendrás la culpa de que otros te insulten, te humillen o te amenacen. No importa si es WhatsApp u otra red social, nunca será culpa tuya. Aunque hayas compartido información o fotografías que están usando para extorsionarte… es culpa del acosador y jamás debes sentirte mal por eso.
- Contacta con un profesional. Si eres menor, habla con tus padres o con alguna persona de confianza y que te ayuden a llevar el caso a manos de un abogado. No tengas miedo, es la mejor forma de denunciar y que la parte acosadora se dé cuenta de que hacer ciberbullying no es ningún juego.
- Recuerda guardar pruebas. Como te hemos comentado más arriba, es fundamental que guardes pruebas con capturas de pantalla. Si son audios, guarda los archivos para poder reproducirlos ante la justicia y siempre, bloquea al usuario. Si son publicaciones en redes sociales, denúncialas en la misma red social también.
Además de tener todo lo anterior en cuenta, también es necesario ser consciente de que nadie puede publicar imágenes o vídeos donde salga tu persona sin tu consentimiento previo. En caso de que hayas enviado una imagen o un vídeo tuyo y otra persona lo esté difundiendo sin tu consentimiento y, lo que es peor, haciendo mofa de ello… es un delito.
No es malo que compartas tus imágenes por redes sociales o por aplicaciones de mensajería instantánea, pero, eso sí, debes tener un criterio muy claro sobre a quién le compartes tus cosas y a quién no. En este sentido, piensa muy bien a quién le compartes esos archivos y por qué. Mantén tu perfil en tus redes sociales siempre en privado para que nadie que no sepas tenga acceso a tus imágenes y vídeos.
En cualquier caso, siempre deberás hablar con un adulto o con tus padres en caso de que estés sufriendo algún tipo de acoso. Sufrirlo en silencio solo hará que empeoren las cosas… no estás solo/a, busca ayuda lo antes posible y defiende tu dignidad de esos cobardes que te acosan a través de una pantalla.