9 beneficios sociales de la música para niños y adolescentes

Una herramienta poderosa para socializar mejor

1.musica
4/5 - (4 votos)

A través de la música, los más jóvenes pueden desarrollar habilidades de comunicación, trabajo en equipo, empatía y resolución de conflictos, lo que les ayuda a establecer relaciones más sólidas y significativas con sus pares y con su entorno.

Un lenguaje universal

Quizá hayamos escuchado anteriormente lo útil que es la música como forma universal de comunicación. Tanto es así que puede ocupar un papel fundamental en el desarrollo y desempeño social de cualquier persona.

Pero si nos animamos a hacer un doble clic sobre el tema, descubriremos que la estimulación temprana musical ya sea durante la infancia como en la adolescencia tiene un efecto casi inmediato en términos sociales.

Esta última afirmación puede generar dudas a más de uno de nosotros, ya que aprender música no es una tarea fácil de perfeccionar, como en cualquier expresión artística.

Sin embargo, no es necesario ni una búsqueda musical profesional ni exhaustiva para gozar de los beneficios sociales que tiene para ofrecer en pleno crecimiento.

A continuación, compartimos una buena gama de razones y beneficios por las cuales la música es tan recomendada en la temprana edad con fines sociales:

1. La música es una herramienta poderosa para ayudar a los niños y adolescentes a socializar mejor, ya que les brinda la oportunidad de conectarse con otros por el solo hecho de crear y disfrutar música juntos.

2. La participación en actividades musicales, como clases de instrumentos, coros o bandas, fomenta la colaboración y el trabajo en equipo, lo que ayuda a los jóvenes a desarrollar habilidades sociales y a aprender a trabajar con otros para lograr un objetivo común, sin importar el nivel de protagonismo de cada instrumento o del intérprete.

3. La música también puede actuar como un medio para expresar emociones y sentimientos, lo que puede ayudar a los niños y adolescentes con más dificultades en este sentido para comunicarse de manera más efectiva con sus pares.

4. La música proporciona un lenguaje común que trasciende las barreras lingüísticas y culturales, lo que facilita la interacción entre niños y adolescentes de diferentes orígenes y experiencias.

5. Participar en actividades musicales puede ayudar a los jóvenes a desarrollar la confianza en sí mismos y en sus habilidades, lo que a su vez puede mejorar su capacidad para relacionarse con otros de manera positiva.

6. La música también puede servir como un punto de conexión para los jóvenes que comparten intereses similares, lo que les brinda la oportunidad de conocer a otros con quienes pueden establecer amistades duraderas y generar lazos difíciles de quebrantar.

7.La participación en actividades musicales puede también fomentar un sentido de pertenencia a un grupo o comunidad, lo que puede ser especialmente beneficioso para los niños y adolescentes que pueden sentirse marginados o solos y en constante búsqueda.

8.La música puede actuar como un catalizador para la creatividad y la expresión personal, lo que puede ayudar a los jóvenes a desarrollar una identidad propia y a encontrar su lugar en el mundo.

9.La música en grupo, como tocar en una banda o cantar en un coro, puede estimular la empatía y la comprensión de los demás, ya que los jóvenes aprenden a escuchar y a responder a las contribuciones de sus compañeros.

 

En resumen, la música es una herramienta invaluable para ayudar a los niños y adolescentes a expandir y profundizar su contacto social, ya que les brinda la oportunidad de conectarse con otros, expresar emociones, desarrollar habilidades sociales específicas, encontrar un sentido de pertenencia y fomentar la creatividad y la empatía.

Joaquín Sombielle

Licenciado en Psicología

Docente de piano y lenguaje musical