Si bien la mayoría de los niños ama el contacto con la música, satisfacer el deseo de aprender con instrumentos musicales puede no ser siempre una tarea sencilla. Para lograr anticiparnos a decisiones precipitadas por falta de información, acercamos algunos tips indispensables para adquirir ese primer instrumento para nuestro hijo.
Es importante contar con cierto criterio a la hora de acompañar este tipo de inquietudes musicales
Ya sea por influencias del hogar, un anuncio de YouTube o por escuchar músicos en la calle, el impacto que la música genera en los niños suele ser intenso y significativo. Algunos llegan a interesarse tanto que pueden anhelar ir más allá y buscan interactuar con ella, no solo desde la escucha.
Así es como llega ese momento donde nuestros hijos quieren aprender un instrumento musical. Y como padres podemos reaccionar de muchas formas: algunos con más entusiasmo por alimentar el costado creativo y expresivo, otros con preocupación por el ruido que pueda generar en casa, además de la inversión económica.
Sea cual sea nuestro caso, es importante contar con cierto criterio a la hora de acompañar este tipo de inquietudes, ya que la infancia es una etapa clave en el desarrollo motriz y cognitivo. Por lo tanto, la elección de uno u otro instrumento puede simplificar o complicar significativamente la experiencia musical durante su crecimiento.
Con esto en mente, presentamos a continuación algunos factores a tener en cuenta, así como también una lista de instrumentos que pensamos pueden ser considerables.
- Pensar en el largo plazo. Sea cual sea el instrumento elegido, aprender música de forma más o menos fluida lleva tiempo. ¿Cuánto? La realidad es que depende de cada caso, pero lo cierto es que recomendamos que sea un instrumento al cual el niño quiera y pueda dedicarle años.
- El espacio. Si, por ejemplo, contamos con un hogar pequeño en dimensiones, una batería no solamente ocupará demasiado lugar, sino que será poco compatible con la dinámica familiar y esto terminará por desmotivar al niño y/o a nosotros mismos de continuar con la actividad.
- Tamaños. ¿Qué hacer si a mi hijo de 6 años le encanta el cello, pero no puede ni siquiera sostenerlo de lo grande que es? ¿Y se siente inhibido por la altura y solemnidad de un piano? Si empezamos a detectar un interés por algún instrumento demasiado grande para la contextura del niño, sería sensato considerar dos opciones: investigar modelos “mini” o considerar otros instrumentos más pequeños.
- No subestimar nuestra influencia. Tal vez porque crecimos en ambientes donde se escuchaba mucha música, llevamos el deseo inconsciente de continuar con ese legado a través de nuestros hijos. O quizás ocurre justamente lo contrario y nuestra relación con la música es negativa o distante, lo que nos lleva a ser poco colaborativos con el genuino interés musical de nuestros hijos. Sea cual sea el disparador, no podemos dejar de contemplar el peso que tiene nuestra opinión y poder de decisión en lo que ellos decidan al elegir su instrumento musical.
¿Qué instrumentos conviene tener en cuenta para nuestra familia?
Guitarra
Por qué sí:
- Portabilidad.
- Muchas opciones de tamaños (existen modelos “baby” más reducidos).
- Extremadamente popular.
- Accesible y ajustable al bolsillo de cada familia.
Por qué no:
- Dominar la técnica general y el correcto manejo de las cuerdas en una primera etapa puede ser desafiante.
- Es un instrumento armónico. Esto les dará tantas posibilidades como responsabilidades a la hora de “sostener” una pieza musical.
Batería
Por qué si:
- Al ser un instrumento 100% rítmico, es sumamente atractivo para los niños y niñas.
- Desarrolla la independencia motriz de todas sus extremidades.
- Existen baterías pequeñas y también del tipo electrónicas, las cuales permiten utilizar auriculares. Esto es particularmente útil si el ruido que puede generar en el hogar o para los vecinos es un problema.
Por qué no:
- Por sus dimensiones y nivel de volumen, no es un instrumento fácilmente “desechable” si el niño pierde el interés.
- Portabilidad compleja y por momentos estresante.
- Extremadamente ruidoso.
Piano
Por qué si:
- Instrumento muy “visual”. La forma secuencial en que las notas están diagramadas resulta muy ilustrativa a la hora de aprender y memorizar
- Junto con la guitarra, el piano es ideal para quienes amen cantar o acompañar a otros cantando.
- Desarrolla la independencia de todos los dedos de las manos de manera equitativa.
Por qué no:
- Difícil portabilidad (salvo que se opte por un teclado, que no es lo mismo que un piano).
- No es nada económico.
- Requiere un nivel de estudio alto para la disociación de ambas manos, lo que puede resultar muy frustrante en una etapa inicial.
Flauta
Por qué sí:
- Extremadamente portátil.
- Distintos tipos y tamaños.
- Se pueden aprender melodías sencillas en poco tiempo.
Por qué no:
- Es un instrumento melódico, y al igual que en el canto suele complementar con una base armónica extra (guitarra, piano, bajo).
- Rango de octavas limitado al registro agudo.