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5 tips de educación financiera para adolescentes

Estrategias de prevención, gestión y capacitación

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En un mundo cada vez más interconectado con tarjetas, cuentas bancarias, sistemas de criptomonedas e inversiones, la educación financiera para adolescentes se vuelve una necesidad cada vez más urgente y relevante. Para esto, exploramos ciertos terrenos para incorporar familiarmente desde nuestro rol familiar.

Adolescentes y jóvenes adultos sienten desinterés o pereza cuando de dinero y administración se trata

La explosión del mercado de criptomonedas, en conjunto con los innumerables cursos, charlas, videoconferencias o carreras relacionadas con las finanzas en la actualidad, nos abren muchas interrogantes e inquietudes.

Entre algunas de ellas, cuesta no reflexionar acerca de qué hubiera pasado si desde nuestra juventud hubiéramos aprendido algunos conceptos o estrategias centrales referidas al tema. A lo mejor, hubiéramos tomado mejores decisiones y nos habríamos ahorrado ciertos disgustos evitables.

La importancia de la educación financiera

¿Y qué pasa con nuestros hijos próximos a convertirse en jóvenes adultos? ¿Qué podemos trasmitirles o traducirles de la ola de información que actualmente circula respecto al asunto? ¿Podemos preparar a nuestros hijos para estar mejor informados y con mejor criterio?

Aún con el boom financiero, todavía encontramos cierto rechazo en gran parte de adolescentes y jóvenes adultos, desinterés o pereza cuando de dinero y administración se trata, por lo que aquí van algunos consejos sobre cómo aproximarlos desde temprano en el mundo financiero.

Gestión y ahorro de dinero

Nuestros hijos tienen una desventaja y una ventaja por ser adolescentes. Por un lado, no suelen contar con mucho dinero sobre el cual decidir o administrar. Por el otro, tienen algo sumamente preciado: tiempo.

Suponiendo que quieran empezar a generar pequeños ingresos con un trabajo de verano o proporcionándoles una mesada, hoy es muy sencillo abrirles una cuenta de ahorro en cualquier banco a su nombre.

Esto generará en ellos la sensación concreta de contar con un dinero propio. Además, les permitirá adquirir una tarjeta de crédito para “practicar” la gestión de gastos y ahorro.

Concientizar acerca de las deudas

Aunque la tarjeta de crédito funciona como una gran herramienta de gestión y seguimiento, también implica un fuerte riesgo a la hora de gastar, ya que es dinero virtual no tangible.

Por lo tanto, no podemos subestimar los impulsos propios de la adolescencia y posibles errores que puedan cometer. Es importante acompañarlos durante todo el proceso hasta que puedan adquirir cierta independencia. También es recomendable empezar con montos bajos para minimizar riesgos y concentrarse en el “cómo” más que en el “qué” se gasta.

Dosificar las mesadas / pagas

Aunque es muy común que las familias en cierto momento comiencen a brindar un monto fijo mensual para que los jóvenes utilicen, se puede profundizar aún más sobre esta estrategia. ¿Qué pasaría si la mesada fuera semanal? Esto generaría en los hijos la necesidad por visualizar más fácilmente el flujo de ingresos y gastos.

Además, se enfrentarían al desafío de la dosificación. No es lo mismo gastar prematuramente el total de la mesada de un mes en la primera semana que dosificarla a lo largo de las semanas.

Trazar objetivos y presupuestos

No importa que edad tengamos las personas, todos tenemos objetivos, sean estos grandes o pequeños. Vale la pena hablar con nuestros hijos de qué les gustaría alcanzar o adquirir. Tal vez es un celular, una pelota, un instrumento o un curso online de fotografía. A partir de reconocer alguna o varias de sus metas, se puede establecer un presupuesto acorde al ingreso y a la capacidad de ahorro con la que ellos cuentan.

Cursos de educación financiera para seguir profundizando

Aunque como padres podemos ayudar mucho con las finanzas, es importante también reconocer nuestros límites en el rubro y aprender a delegar y derivarlos con especialistas.

Más aún, si notamos un mayor interés en nuestros hijos por ciertas herramientas financieras por sobre otras. Ese puede ser un gran momento para inscribirse en distintos cursos.

Aunque puede ser de forma presencial, hoy existen infinidad de cursos online y gratuitos para anotarse y que puedan experimentar y adentrarse aún más en las profundas aguas del sistema financiero.